Dejemos que fluyan sentimientos, y solidifiquen palabras, y creen arte...

En aquél rincón escondido de mi memoria, ruge el mar.
Y como el vaivén de las olas, vienen y van mis pensamientos...

martes, 11 de junio de 2013

Parpadeo

Hoy necesito escribir. Necesito escribirte, y ni siquiera sé quien eres...

He vuelto a flaquear, y olvidé contártelo, siempre lo hacía... ya que quizás tú, en silencio, seas quien mejor me sabe escuchar.

Sin embargo esta vez no he caído. Hace tiempo planté los pies sobre la tierra, y desde entonces he andado mucho mas lento, pisando sobre un suelo seguro, sin baches.
Pienso que quizás haya perdido algún tiempo por miedo a correr, a saltar, a volar... Solamente por si después tropezaba o me cortaban las alas.

Pero me ha hecho pensar. Recordar cómo ha sido cada etapa de mi vida  y darme cuenta de que efectivamente es la fuerza de cada persona la que nos hace ser felices, y no las circunstancias.

Puede que de alguna manera, el momento, el entorno, la vida... Nos guíen, nos orienten a un estado, a una manera de vivir; sin embargo, en cierto modo, lo creas o no, nosotros siempre lo elegimos.

Yo elegí en cada momento, en cada instante qué hacer, yo elegí cometer errores...
Culpaba a "todo" sobre los males que me acechaban, y no era capaz de asimilar que siempre hay una salida. Ese fue el problema, la cuestión no es pensar porqué lo vemos todo a oscuras, sino descubrir cómo podemos abrir los ojos.

Y si... Hace tiempo me prometí no llorar. Y hoy sé que nunca estuve tan equivocado...



Esclavo del verso...